La HBO ha anunciado oficialmente a los protagonistas del esperado reboot de la saga “Harry Potter”, con Dominic McLaughlin como Harry, Arabella Stanton como Hermione y Alastair Stout como Ron. La revelación del nuevo reparto ha provocado una gran reacción entre los fans, reavivando el debate en torno a la relación entre J.K. Rowling, autora de la saga, y los actores originales.
Durante los últimos años, Rowling ha mantenido una relación tensa con Daniel Radcliffe, Emma Watson y Rupert Grint, debido a sus declaraciones públicas sobre personas trans. Los tres actores se distanciaron de la autora, pronunciándose a favor de los derechos trans. Watson afirmó que “las personas trans son quienes dicen ser”, mientras que Radcliffe pidió disculpas a la comunidad trans por los comentarios de Rowling.
A pesar del conflicto, Rowling sorprendió al expresar su entusiasmo por la nueva generación de actores, asegurando que “no podría estar más feliz” con el nuevo elenco. Sin embargo, dejó claro que no está dispuesta a reconciliarse con los intérpretes originales. En respuesta a un fan que sugirió una posible reconciliación, Rowling fue tajante: “Las celebridades que se alinearon con un movimiento cuyo objetivo es erosionar los derechos conquistados por las mujeres pueden guardar sus disculpas”.
Rowling ha sido objeto de fuertes críticas por sus posturas, consideradas transfóbicas por muchos, incluyendo el uso incorrecto de pronombres y su apoyo al controvertido Informe Cass, que cuestiona tratamientos médicos para jóvenes trans. En contraste, Radcliffe reconoció la influencia de Rowling en su carrera, pero defendió su derecho a mantener sus convicciones personales.
La nueva serie promete ser fiel a los siete libros originales y busca renovar la magia del universo de Harry Potter para una nueva generación. Con el respaldo de Rowling al nuevo reparto, el proyecto comienza con buen pie, aunque las tensiones del pasado aún proyectan su sombra sobre el legado de la franquicia.


