El gobierno francés comunicó este domingo 9 de marzo la aprobación de un nuevo paquete de asistencia bélica para Ucrania. La suma asciende a 195 millones de euros, según declaró el titular de Defensa francés, Sébastien Lecornu. Estos recursos provienen directamente de los rendimientos generados por bienes rusos inmovilizados en territorio francés.
Durante su conversación con medios franceses, Lecornu subrayó que, pese a la “imprevisibilidad” del mandatario estadounidense Donald Trump, Francia continuará brindando respaldo militar a Kiev mediante el suministro tanto de armamento como de datos de inteligencia crucial para las operaciones ucranianas.
El arsenal que se enviará incluye carros de combate AMX-10RC, transportes blindados VAB, artillería de 155 mm y municiones para los cazas Mirage 2000 previamente entregados. Lecornu especificó en su entrevista con La Tribune Dimanche que estos equipos procederán directamente de los depósitos militares franceses.
El ministro anunció la convocatoria para el próximo jueves 13 de marzo de una reunión con representantes parlamentarios, altos mandos militares y responsables de servicios de inteligencia para informar sobre la situación internacional. Como colaborador cercano del presidente Macron, Lecornu insistió en que no pretenden “dramatizar” el panorama geopolítico actual, sino ofrecer una evaluación “lúcida” para concienciar sobre los riesgos existentes.
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A pesar de la conducta errática de Trump, Francia sigue considerando a Washington como aliado, enfatizó el ministro. Aunque reconoció que la interrupción de la ayuda estadounidense ha supuesto un severo revés para Ucrania, expresó su confianza en que las fuerzas de Kiev podrán mantener sus posiciones defensivas temporalmente.
Durante la entrevista, Lecornu intentó calmar las inquietudes de la ciudadanía francesa ante la escalada de tensiones. Aclaró que las medidas defendidas por Macron en su reciente alocución televisiva no constituyen un “esfuerzo de guerra”, sino acciones defensivas y disuasorias. “No estamos en guerra”, aseguró categóricamente.
Rusia persiste en su ofensiva contra territorio ucraniano
El presidente Zelensky informó el sábado 8 de marzo que una delegación ucraniana se reunirá con representantes estadounidenses el martes 11 en Arabia Saudí para delinear, según Washington, “los parámetros de un acuerdo de paz”.
Mientras Trump presiona por un “alto el fuego inmediato”, Moscú mantiene sus operaciones ofensivas diarias contra el país vecino.
Las autoridades aéreas ucranianas reportaron el lanzamiento de 119 drones rusos contra diversas zonas del país durante la noche del sábado al domingo, incluyendo la capital. De estos, 71 fueron neutralizados y otros 37 no causaron daños significativos.
El Kremlin, por su parte, proclamó la captura de otra localidad en la región de Donetsk, al este ucraniano. Un comunicado del Ministerio de Defensa ruso afirma que sus fuerzas han tomado control de Kostyantynopil, situada a 50 kilómetros de la ciudad de Donetsk, bajo ocupación rusa.
Previamente, Rusia anunció haber recuperado otra población en la región de Sumy, en una maniobra transfronteriza vinculada a los enfrentamientos con tropas ucranianas que aún controlan una fracción de la región rusa de Kursk. La estrategia de Zelensky de utilizar la ocupación de Kursk como baza negociadora se ha debilitado considerablemente; sin el respaldo de inteligencia estadounidense y ante el avance de contingentes rusos y norcoreanos, Ucrania ha perdido ya dos terceras partes del territorio que conquistó en agosto del año pasado.
