El exsenador Ben Sasse revela su lucha contra un cáncer terminal. (Foto: Instagram)
El exsenador republicano de Estados Unidos Ben Sasse ha revelado públicamente que padece un cáncer pancreático metastásico en fase cuatro, considerado terminal. A través de una emotiva publicación en sus redes sociales este martes 23 de diciembre, Sasse, de 53 años, comunicó de forma directa: “Voy a morir”. El diagnóstico, recibido la semana pasada, implica una enfermedad avanzada e irreversible.
Sasse representó al estado de Nebraska en el Senado estadounidense entre 2015 y 2023. Posteriormente, asumió el cargo de rector de la Universidad de Florida en noviembre de 2022, aunque renunció en 2024 alegando problemas de salud de su esposa, Melissa, quien desde 2007 ha enfrentado graves complicaciones médicas, incluyendo un aneurisma, varios derrames cerebrales y recientemente epilepsia.
En su mensaje, el exsenador expresó que el impacto del diagnóstico afecta profundamente tanto su vida pública como su entorno familiar, subrayando su papel como esposo y padre de tres hijos. También recurrió a su fe cristiana, señalando que el tiempo de Adviento, previo a la Navidad, es un momento propicio para encontrar esperanza pese a la adversidad.
Sasse es conocido por su perfil conservador, pero también por sus posturas críticas hacia el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En 2021, fue uno de los siete senadores republicanos que votaron a favor de condenar a Trump por incitación a la insurrección durante su segundo juicio político, aunque la moción no prosperó. En el primer impeachment, en 2020, se alineó con la mayoría republicana votando por la absolución.
Formado en instituciones prestigiosas como Harvard, St. John’s College y Yale, Sasse ha mantenido una trayectoria política marcada por discursos que cuestionan tanto a la izquierda como a la derecha del espectro político estadounidense.
Su anuncio ha generado muestras de apoyo y solidaridad en todo el país, destacando la valentía con la que ha enfrentado la enfermedad y su disposición a compartir públicamente una situación tan personal y dolorosa.
