Aumenta la tensión entre China y Japón tras maniobras militares en el Pacífico. (Foto: Instagram)
La tensión entre China y Japón ha escalado tras el anuncio del gobierno japonés de desplegar misiles guiados superficie-aire de medio alcance en la isla de Yonaguni, ubicada a tan solo 110 kilómetros de Taiwán. Esta medida, según el ministro de Defensa japonés, Shinjiro Koizumi, busca reducir el riesgo de ataques sobre su territorio sin aumentar las tensiones regionales. No obstante, Pekín ha reaccionado con dureza.
El Ministerio de Defensa Nacional de China advirtió este jueves que Japón pagará un "precio alto" si cruza la "línea roja" con esta acción, calificándola de provocación. El portavoz militar chino, coronel Jiang Bin, acusó a Japón de ignorar su pasado colonial en Taiwán y de adoptar una postura equivocada al sugerir una posible intervención militar en caso de conflicto en la isla.
La primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, había declarado previamente que Japón podría actuar militarmente si China avanzaba sobre Taiwán, lo que ha contribuido a agravar la situación diplomática entre ambos países.
Taiwán, por su parte, ha incrementado su presupuesto de defensa en respuesta a la creciente presión de Pekín, anunciando una partida especial de 40.000 millones de dólares (aproximadamente 37.000 millones de euros). El presidente taiwanés reafirmó el compromiso de su país con la paz y la defensa de su soberanía.
China considera a Taiwán una parte inseparable de su territorio y ha insistido en que su reunificación es esencial para mantener el orden internacional establecido tras la Segunda Guerra Mundial. En una conversación telefónica reciente con el presidente estadounidense Donald Trump, el presidente chino Xi Jinping instó a Estados Unidos a colaborar con China en la defensa de este principio, recordando la alianza histórica entre ambos países contra el fascismo.
La escalada de declaraciones y movimientos militares en la región refuerza la preocupación internacional sobre un posible conflicto en el estrecho de Taiwán, con implicaciones globales dada la participación de potencias como Estados Unidos.
