
Bruno Rodríguez denuncia la presencia militar de EE.UU. en el Caribe como una amenaza regional. (Foto: Instagram)
El ministro de Asuntos Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, ha lanzado una dura crítica contra la creciente presencia militar de Estados Unidos en el Caribe, calificándola de “exagerada y agresiva”. Según Rodríguez, esta movilización representa una amenaza directa para América Latina y el Caribe, y podría desencadenar una acción “extremadamente peligrosa e irresponsable”.
El canciller cubano advirtió que una posible intervención militar estadounidense para derrocar al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela violaría el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas. Además, alertó sobre consecuencias imprevisibles para la región, incluyendo un “incalculable número de muertes” y una posible desestabilización hemisférica.
Rodríguez también denunció que la justificación de Washington de combatir el narcotráfico es un “pretexto insostenible”. En su declaración, hizo un llamamiento directo al pueblo estadounidense para que detenga lo que calificó como “esta maldad”.
La tensión aumentó tras la visita del general estadounidense Dan Caine a una base militar en Puerto Rico y a uno de los buques de guerra desplazados al Caribe, en el marco de la Operación Lanza del Sur. Esta operación ha sido descrita como la mayor movilización naval de EE.UU. en la región desde la Crisis de los Misiles de 1962.
Además, el gobierno del presidente Donald Trump ha intensificado la presión sobre Venezuela al declarar al llamado Cartel de los Soles como organización terrorista, lo que allana el camino para nuevas sanciones económicas y acciones militares.
Cuba ha reiterado su total apoyo al gobierno de Maduro y ha condenado la escalada militar estadounidense “en los términos más enérgicos posibles”. Rodríguez subrayó que una guerra no resolvería los problemas políticos ni económicos de EE.UU., sino que reforzaría su histórica intención de dominar la región.
Por su parte, el presidente venezolano Nicolás Maduro declaró que el país está preparado para resistir cualquier agresión. Convocó al pueblo venezolano a la “unidad y firmeza” frente a las maniobras militares de EE.UU., asegurando que “no conseguirán derrotar a Venezuela”.


