Los ministros de Defensa de Tailandia y Camboya, Gen. Nattapion Nakphong y Gen. Tea Seiha, posan con el documento del alto el fuego firmado el 27 de diciembre. (Foto: Instagram)
Tailandia y Camboya han anunciado un alto el fuego “inmediato” en su disputa fronteriza, que ha dejado al menos 47 muertos (26 tailandeses y 21 camboyanos) y casi un millón de desplazados en tres semanas. El acuerdo, firmado el 27 de diciembre por los ministros de Defensa de ambos países, incluye el congelamiento de posiciones militares, la retirada de minas, cooperación policial contra el cibercrimen y la liberación de 18 soldados camboyanos por parte de Bangcoc.
El cese de hostilidades entró en vigor al mediodía (hora local) y contempla el retorno seguro y sin trabas de civiles a las zonas afectadas, permitiendo a miles pasar el Año Nuevo en sus hogares. Aun así, muchos desplazados, como la joven cambojana Oeum Raksmey, temen regresar por desconfianza mutua.
Esta última tregua llega tras la mediación de Donald Trump, quien en julio facilitó un acuerdo temporal que se firmó en Kuala Lumpur en octubre, pero se suspendió semanas después. Tras el fracaso de una tregua anunciada el 12 de diciembre, la presión de China y la ASEAN condujo a negociaciones directas el 22 de diciembre.
Pese a este avance, persiste la controversia sobre la demarcación de la frontera de 800 km y la soberanía de templos como Preah Vihear (Patrimonio Mundial). El primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, confía en que esta vez la firma será definitiva. En Tailandia están convocadas elecciones parlamentarias para el 8 de febrero, un factor político clave para el mantenimiento de la paz.
