Lucinete Freitas, una niñera brasileña de 55 años, fue hallada muerta en Amadora tras desaparecer el pasado 5 de diciembre. (Foto: Instagram)
Lucinete Freitas, una mujer brasileña de 55 años que trabajaba como niñera en Portugal, fue hallada muerta tras haber estado desaparecida desde el 5 de diciembre. Su cuerpo fue encontrado en una zona boscosa y apartada en la región de Amadora, en la periferia de Lisboa, cubierto con objetos para ocultarlo. La Policía Judiciaria portuguesa ha detenido a una sospechosa de 43 años, también brasileña, acusada de homicidio calificado, profanación y ocultación de cadáver.
Según las autoridades, la investigación permitió reunir pruebas suficientes para identificar y localizar a la sospechosa, quien será presentada ante el juez para su primer interrogatorio. La policía indicó que el crimen podría haberse cometido por un motivo fútil, aunque no se han revelado detalles específicos sobre la motivación.
Lucinete, originaria de Aracoiaba (Ceará), había emigrado a Portugal en abril con el plan de establecerse en el país junto a su marido, José Teodoro Jr, y su hijo de 14 años. Ella se adelantó para instalarse y conseguir empleo, mientras su familia planeaba reunirse con ella más adelante. Durante su estancia, vivía sola y trabajaba como niñera en una vivienda de Amadora.
El día de su desaparición, Lucinete tenía una cita para visitar un inmueble, pero nunca se presentó. Su marido, al no recibir respuestas a sus mensajes ni llamadas, contactó con su empleador, quien confirmó que ella no había asistido al trabajo desde el 5 de diciembre, algo inusual para alguien considerada muy responsable. Posteriormente, una mujer encargada del alquiler del inmueble informó que Lucinete había cancelado la visita diciendo que viajaría dentro del país con una amiga, pero no se supo más de ella.
La familia, que no tuvo noticias durante más de una semana, ahora desea repatriar el cuerpo de Lucinete para enterrarla en Brasil.
