José Antonio Kast celebra su victoria en la segunda vuelta presidencial en Chile, marcando un giro hacia la extrema derecha. (Foto: Instagram)
José Antonio Kast ha sido elegido presidente de Chile tras vencer en la segunda vuelta electoral celebrada el domingo 14 de diciembre, obteniendo el 58,30% de los votos. Esta victoria marca el ascenso de un gobierno de extrema derecha en el país andino, con un programa centrado en la seguridad, la inmigración y la reducción del gasto público.
Inspirado en las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Kast propone la creación de una fuerza policial similar al ICE estadounidense para combatir la inmigración ilegal. Además, ha planteado la construcción de un muro fronterizo, denominado "Escudo de Frontera", para evitar entradas no autorizadas al país.
En el ámbito educativo, el nuevo mandatario chileno ha prometido eliminar la "ideología" de las aulas y devolver a los padres el control sobre la educación de sus hijos. En cuanto a la lucha contra el narcotráfico, Kast ha asegurado que utilizará la fuerza para erradicar esta problemática.
A nivel económico, su plan incluye una reducción del gasto público en aproximadamente 6.000 millones de dólares (unos 5.580 millones de euros) y una baja del impuesto corporativo para empresas medianas y grandes hasta el 25%. También propone eliminar el impuesto sobre las ganancias de capital en la venta de acciones.
Kast ha sido frecuentemente vinculado con la dictadura militar chilena. Es hijo de un soldado nazi alemán y ha manifestado públicamente su apoyo al dictador Augusto Pinochet. Durante el último debate presidencial, defendió la reducción de penas para los condenados por crímenes cometidos durante el régimen militar, especialmente aquellos en edad avanzada o con enfermedades terminales.
En política exterior, ha expresado su respaldo a una intervención militar para derrocar al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela y ha declarado compartir visiones con el presidente argentino Javier Milei.
