Harleigh Tidd, una niña británica de 3 años, ha sido diagnosticada con una combinación única y extremadamente rara de enfermedades que afectan sus pulmones, huesos y órganos internos. Detectada durante el embarazo, su condición se evidenció por una anomalía cerca del corazón observada en una ecografía en la semana 36 de gestación. Desde su nacimiento, Harleigh ha sido considerada un “bebé milagro”, pero su estado de salud se ha deteriorado progresivamente.
Desde diciembre de 2024, Harleigh ha sido sometida a 38 cirugías y vive bajo cuidados intensivos. Los médicos han identificado una combinación sin precedentes de linfangioleiomiomatosis (crecimiento anormal de células musculares en los pulmones), quilotórax (acumulación de fluido linfático en el tórax) y displasia esquelética (trastorno del desarrollo óseo). No se conoce ningún otro caso en el mundo con esta combinación de enfermedades.
En septiembre de 2025, los médicos informaron a la familia que la enfermedad se había extendido al intestino, estómago y bazo, y que no quedaban opciones de tratamiento. Los padres, Stacie Hammond (45 años) y Stephen Tidd (28 años), han firmado una orden de no reanimación y reciben cuidados paliativos. Harleigh recibió su último drenaje torácico a finales de octubre, que se estima durará unas diez semanas, tras lo cual se espera que tenga solo unos días de vida.
A pesar del devastador diagnóstico, la familia ha lanzado una campaña de recaudación de fondos para cumplir el último deseo de Harleigh: visitar Disneyland. “Queremos que tenga un momento increíble y que su historia inspire a otras familias”, declaró su madre. Además, han expresado su deseo de donar sus órganos para contribuir a la medicina y ayudar a salvar otras vidas.
La historia de Harleigh no solo conmueve por su lucha, sino también por la determinación de sus padres de transformar el dolor en esperanza y legado.


