En Arlington Heights, un suburbio de Chicago (Estados Unidos), el hospital Endeavor’s Northwest Community organizó en menos de 24 horas una emotiva ceremonia de boda para que Dan Benway, de 66 años y en tratamiento por un cáncer pancreático en fase 4, pudiera cumplir su deseo de acompañar a su hija al altar.
Grace Benway y su prometido, Thomas Decourcey, tenían previsto casarse el mes siguiente en Colorado. Sin embargo, el deterioro repentino del estado de salud de Dan llevó a la familia a adelantar la celebración. Gracias al apoyo del personal médico y de enfermería del hospital, la ceremonia se llevó a cabo en el jardín de mariposas del centro sanitario, con música en vivo y un oficiante.
Dan, en silla de ruedas, recorrió el pasillo junto a su hija en un momento que conmovió tanto a familiares como al equipo médico. “Soy un hombre afortunado. No podría sentirme más bendecido”, declaró emocionado.
Diagnosticado en noviembre de 2023, Dan ha enfrentado la enfermedad con fortaleza: se ha sometido a 40 sesiones de quimioterapia y a una cirugía para extirpar tumores. A pesar del tratamiento, logró seguir trabajando en Chicago hasta abril de este año.
Grace describió a su padre como un verdadero luchador, y él expresó su alegría por ver a su hija comenzar una nueva etapa. “Fueron hechos el uno para el otro. Él tiene suerte de tenerla. Es probablemente lo mejor que podría pedir como padre”, afirmó.
La historia ha tenido gran repercusión en los medios estadounidenses, destacando el poder del amor familiar y la solidaridad del personal sanitario. Este gesto demuestra cómo, incluso en momentos difíciles, la humanidad y la compasión pueden crear recuerdos imborrables.