





La modelo e influencer Marie Temara, de 1,91 metros de altura, ha aprovechado su imponente físico para levantar un imperio inmobiliario valorado en millones. Con unos ingresos anuales de aproximadamente € 9 millones de euros, ha invertido en 16 propiedades, un yate de lujo de € 1 millón de euros y actualmente reside en una vivienda valorada en € 1,7 millones de euros, que incluye un gimnasio privado de medio millón de reales.
Marie, que cuenta con 3 millones de seguidores en Instagram, asegura que siempre soñó con tener un yate y que ahora cumple ese deseo, manteniendo la embarcación en su casa frente al mar, donde también dispone de dos motos de agua. Además de la vivienda principal, regaló a sus padres una casa contigua valorada en € 610.000 euros, mientras que las otras 14 propiedades las destina al alquiler como fuente de ingresos.
Con planes aún más ambiciosos, la modelo quiere derribar su actual residencia de cinco habitaciones para construir una mansión a medida, valorada en € 4,4 millones de euros, con techos de 7,6 metros y puertas de 3,6 metros adaptadas a su estatura. Marie subraya que procede de una familia humilde y que ahora puede ofrecer a sus padres confort y lujo, jubilándoles y llevándoles de viaje en primera clase por todo el mundo.
La familia Temara es notoriamente alta: su madre Christine, de 1,95 metros, dejó su trabajo como operadora de emergencias y ahora vende fotos de sus pies en internet; su padre Michael, de 1,91 metros, abandonó la electricidad después de ganar € 43.000 euros con contenido online. Sus hermanos Troy y Shane, jugadores de baloncesto de 2,08 y 2,06 metros respectivamente, compiten por ver quién gana más dinero.
Marie afirma que quiere seguir ampliando su imperio y garantizar la estabilidad financiera de las próximas generaciones. “Algún día quiero tener mi propia familia alta”, concluye.